
Daniela Alanis Mendez
28 jul 2025
Hoy, el camino que tanto nos ha unido en la fé y esperanza se viste de luto. José Luis murió haciendo lo que más amaba: caminar con fé hacia la Virgen de Guadalupe.
Un hombre originario de Querétaro murió luego de ser golpeado por una roca que se desprendió del Cerro del Tepeyac, a pocos metros de la Basílica de Guadalupe , en la alcaldía Gustavo A. Madero de la Ciudad de México.
El incidente ocurrió la mañana del lunes 28 de Julio, justo frente a la estación del Metrobus Hospital Infantil La Villa, cuando llegaba el contingente femenino de la Peregrinación a pie desde Querétaro.
Según información oficial, la roca medía aproximadamente 2.5 metros de diámetro y pesaba cerca de 2 toneladas. El desprendimiento ocurrió en una zona cercana al panteón del Tepeyac, que es propiedad de un fideicomiso privado, vinculado a la Basílica.

Personal de protección civil brindó atención inmediata en el lugar y fue trasladado al Hospital de la Villa, dónde falleció minutos después, confirmaron sus familiares. En un primer momento se informó únicamente de una persona lesionada; sin embargo, horas más tarde se confirmó el deceso por la gravedad de las lesiones.
Las autoridades acordaron la zona y realizan medidas de mitigación para prevenir nuevos desprendimientos, la zona estaba bajo vigilancia debido a la llegada de más de 100,000 peregrinos provenientes de Querétaro, según informó la Secretaria de Seguridad Ciudadana.

La víctima fue identificada como José Luis Paredón Cornejo, de 76 años,provenía de una familia con profunda tradición religiosa. Era hermano del periodista Manuel Paredón Cornejo y durante más de cinco décadas participó en la peregrinación anual al santuario guadalupano, fusionando cada paso con sus creencias, promesas y agradecimientos, según testimonios de sus seres queridos.
Durante la emergencia, se determinó que la víctima no portaba identificación de los grupos organizados de peregrinos, lo que complicó su identificación inicial. Sin embargo, recibió atención médica inmediata. Las autoridades notificaron a la fiscalía para que realicen las investigaciones correspondientes.
José Luis no era un hombre cualquiera. Era testimonio vivo de la devoción queretana, de esa fuerza que nos mueve a caminar cientos de kilómetros no por obligación,si no por amor, gratitud y fé.

Descansa en paz, hermano peregrino. Hoy caminamos por tí





